Francisco Valiente Polillas es un joven Toledano de 22 años. Vive con su madre, no
tiene ni oficio ni beneficio y tampoco ayuda en las tareas de casa. Delgado,
esbelto, inteligente, pero con pocas ganas de trabajar, Francisco se pasa las
hora en su base de operaciones; el sótano de su casa, en el cual tiene dos
ordenadores con toda la parafernalia para jugar a los videojuegos, navegar por
Internet, chatear y disfrutar de su pasión que es el cine.
Un buen día decide inventarse un currículum, tras subirlo
a Internet, pronto recoge los frutos. Al día siguiente recibe una carta
contratándolo como detective privado, la misión es en Dubai. Han asesinado a un
importante hombre de negocios español en el hotel más lujoso de Dubai. Tras
viajar al país, se lleva una sorpresa al conocer a su cliente.
Francisco que jamás ha trabajado de detective ahora
tendrá que poner su masa gris en funcionamiento para descubrir al asesino de un
escabroso crimen al tiempo que tiene que competir contra los mejores
investigadores del planeta que también han sido contratados por otros clientes.
¿Conseguirá nuestro amigo resolver el crimen sin quedar
en ridículo delante de tan experimentados profesionales?
Alexander Copperwhite nos presenta su última nueva novela
corta. Aunque tiene los elementos de novela negra, tiene muchas pinceladas de
humor que hacen que la lectura sea muy entretenida. La acción también
transcurre en un ritmo ágil a lo largo de las 91 páginas. La novela es apta
para adultos, tanto como para adolescentes.
El autor aprovecha para sacar el tema de la
homosexualidad y hacernos ver que son personas normales cuyo único objetivo es
vivir felices sin molestar a nadie ni ser molestados, aunque en algunos países
están perseguidos e incluso se les condena a muerte. También quiero destacar
una frase de la página 88, la cual ha traído a mi memoria un frase de Miguel Unamuno:
-¡Pobre
España!- La frase del libro es: — Lástima de los países que echan a
perder los cerebros de una juventud brillante —.
En definitiva una novela para leer de un tirón haciéndonos
pasar un buen rato y también reflexionar sobre un colectivo de nuestra
sociedad. Ahora a esperar la nueva entrega de nuestro amigo detective; Blanco, asesinato en Londres.